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| La alcaldesa, María Ramallo, flanqueada por sus concejales, Pablo Novas y Marián Sanmartin en el 'Desayuno Nadal' con la prensa. Foto CN/CM |
La alcaldesa, Maria Ramallo, junto con dos de sus concejales del ‘núcleo duro’ de su equipo de gobierno, Pablo Novas (Rural) y Marián Samartín (Cultura, Festas e Benestar Social) comparecía ayer en el tradicional 'Desayuno Nadal' para hacer balance ante la prensa de su gestión a lo largo del año a punto de despedir y dar cuenta de los proyectos que se afrontarán en el venidero y ya a las puertas del 2025.
La regidora municipal comenzó diciendo que el 2024 “foi un ano
estable para o Goberno Municipal, no que se traballou arreo para
manter a mesma liña que comenzamos no arranque do mandato” destacando como un
logro a celebrar la aprobación del Presupuesto Municipal 2025 (que asciende a
18 millones de euros) y valorando que “en todos os meus anos, dice la
alcaldesa, non recordó ter aprobado un orzamento municipal en tan corto plazo…”
Después de manifestarse “orgullosa da xestión a pesar das dificultades de financiación”, María Ramallo, remataba el balance del 2024 destacando que “foi un ano de obras: humanización da Avenida de Ourense e Concepción Arenal, que se suman, en materia de infcrestructuras ao Centro Sociocultural (Auditorio) e outras”.
En la otra cara de la moneda (la cruz) la alcaldesa se refirió a los temas más relevantes a los que espera dar solución definitiva en el 2025. Por una parte, finalizar las obras del Auditorio (‘la joya de la corona’ de su gobierno) y buscar salida a la falta de aparcamiento, un problema al que si no le encuentra la solución –en los dos años y medio que le quedan de mandato- que se viene demandando por parte de la ciudadanía, el asunto podría causarle un desgaste a su éxito electoral.
Y precisamente en este aspecto no dio muchas esperanzas de que se vaya a resolver por la vía de la construcción de un parking subterráneo bajo el Parque Eguren, un proyecto ambicioso pero de difícil consecución, según María Ramallo reconocía, manifestando que el problema de aparca se intentará resolver “parcheando con más aparcamientos disuasorios después de que los estudios técnicos para construir el aparcamiento bajo el Eguren no den con la viabilidad económica necesaria para que una empresa privada se haga cargo del proyecto porque su construcción y explotación no sería rentable”.
Así que de momento y por largo tiempo habrá que ir olvidándose de tal posibilidad –“hasta el año que viene en estas fecha no sabremos más sobre el tema”, dijo la alcaldesa- y los usuarios de vehículos tendrán que ir ‘apañándose’ con los ‘disuasorios’ y la ‘zona azul' de dos hora gratis’.
Después de manifestarse “orgullosa da xestión a pesar das dificultades de financiación”, María Ramallo, remataba el balance del 2024 destacando que “foi un ano de obras: humanización da Avenida de Ourense e Concepción Arenal, que se suman, en materia de infcrestructuras ao Centro Sociocultural (Auditorio) e outras”.
En la otra cara de la moneda (la cruz) la alcaldesa se refirió a los temas más relevantes a los que espera dar solución definitiva en el 2025. Por una parte, finalizar las obras del Auditorio (‘la joya de la corona’ de su gobierno) y buscar salida a la falta de aparcamiento, un problema al que si no le encuentra la solución –en los dos años y medio que le quedan de mandato- que se viene demandando por parte de la ciudadanía, el asunto podría causarle un desgaste a su éxito electoral.
Y precisamente en este aspecto no dio muchas esperanzas de que se vaya a resolver por la vía de la construcción de un parking subterráneo bajo el Parque Eguren, un proyecto ambicioso pero de difícil consecución, según María Ramallo reconocía, manifestando que el problema de aparca se intentará resolver “parcheando con más aparcamientos disuasorios después de que los estudios técnicos para construir el aparcamiento bajo el Eguren no den con la viabilidad económica necesaria para que una empresa privada se haga cargo del proyecto porque su construcción y explotación no sería rentable”.
Así que de momento y por largo tiempo habrá que ir olvidándose de tal posibilidad –“hasta el año que viene en estas fecha no sabremos más sobre el tema”, dijo la alcaldesa- y los usuarios de vehículos tendrán que ir ‘apañándose’ con los ‘disuasorios’ y la ‘zona azul' de dos hora gratis’.
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| El retraso de las obras del Auditorio no hará posible su inauguración hasta el mes de mayo, el nuevo plazo establecido después de que prometidos plazos anteriores no se pudiesen cumplir. Foto: DP |
En cuanto a la inauguración
del Auditorio (al que ahora no se por qué se le llama Centro Sociocultural) María Ramallo
adelantó la posibilidad de que éste abrirá sus puertas en mayo próximo, es decir
se prolonga su apertura a los varios plazos, comprometidos y no cumplidos, por diversos avatares, que se han venido calculando desde que –en
febrero próximo hará cinco años- fue presentado el proyecto de su construcción
que según se dijo entonces estaría terminado en el 2022.
En definitiva que si por una parte (la cara del balance) el informe de gestión ofrecido por María Ramallo en su ‘Desayuno de Nadal’ nos aporta buenas noticias de obras y proyectos, unos ya realizados y otros en marcha, -como el acondicionamiento y mejora medioambiental de la dársena-cementerio de embarcaciones menores, por otra (la cruz del balance) no son tan buenas noticias el anunciar el prolongado plazo de espera, hasta mayo o el próximo verano (allá lleguemos) para poder disfrutar del Auditorio y las pocas esperanzas de que algún día se haga realidad un parking subterráneo para ganar plazas de estacionamiento en el casco urbano de Marín. (Leer más información)
En definitiva que si por una parte (la cara del balance) el informe de gestión ofrecido por María Ramallo en su ‘Desayuno de Nadal’ nos aporta buenas noticias de obras y proyectos, unos ya realizados y otros en marcha, -como el acondicionamiento y mejora medioambiental de la dársena-cementerio de embarcaciones menores, por otra (la cruz del balance) no son tan buenas noticias el anunciar el prolongado plazo de espera, hasta mayo o el próximo verano (allá lleguemos) para poder disfrutar del Auditorio y las pocas esperanzas de que algún día se haga realidad un parking subterráneo para ganar plazas de estacionamiento en el casco urbano de Marín. (Leer más información)
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