Pasado mañana se cumplirán dos años de las elecciones municipales celebradas el 28 de mayo de 2023 y estaremos a otros dos de las siguientes. Del periodo electoral y resultados de aquellas elecciones guarda uno recuerdo así como de las contiendas que por alcanzar el poder municipal mantenían los partidos bajo el lema de que todo lo que se prometía era en beneficio del pueblo y sus vecinos.
Para entonces gobernaba el
Partido Popular liderado por la alcaldesa María Ramallo que volvía a
presentarse para revalidar el mandato al que llegó en 2011. Doce años
llevaba gobernando ya con mayoría absoluta. Su intención era la de “seguir
gobernando –con el objetivo de continuar muchos de los proyectos
puestos en marcha en mandatos anteriores- consciente del esfuerzo que
supone, decía, tener una mayoría absoluta”. Y lo consiguió, aunque con menor
número de concejales (12) que le
facilitaron la Alcaldía una vez más.
Por su parte el candidato del PSOE, Manuel Pazos Lamoso llegaba cargado de ilusión: “tenemos claro que nuestro objetivo es seguir creciendo…” afirmaba esperanzado basándose en que “había unas ganas de cambio…” de lo que estaba convencido: “porque lo veo, lo noto y lo siento”. Pues no. No hubo crecimiento en las filas socialistas ni cambio en el gobierno municipal. El PSOE solo consiguió mantener el mismo número de escaños que ya tenía.
facilitaron la Alcaldía una vez más.
Por su parte el candidato del PSOE, Manuel Pazos Lamoso llegaba cargado de ilusión: “tenemos claro que nuestro objetivo es seguir creciendo…” afirmaba esperanzado basándose en que “había unas ganas de cambio…” de lo que estaba convencido: “porque lo veo, lo noto y lo siento”. Pues no. No hubo crecimiento en las filas socialistas ni cambio en el gobierno municipal. El PSOE solo consiguió mantener el mismo número de escaños que ya tenía.
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Candidato e candidatas a la Alcaldía del Concello de Marín. 28 de mayo 2023. |
Respecto al BNG presentaba
como cabeza de cartel a su militante Lucia Santos Omil, una mujer en la
que los nacionalistas depositaron toda su confianza y ganas de cuando
menos subir el número de concejales bajo la premisa de que como ella
manifestaba: “a nosa prioridade e convencer de que somos a alternativa”.
Los resultados le fueron positivos pero la alternativa quedó por demostrar porque si bien la formación nacionalista consiguió pasar de ocupar tan solo un escaño en la bancada municipal a cuatro, esta cifra no fue suficiente para poder gobernar ni siquiera en coalición con el PSOE. La subida en número de ediles fue sorprendente a la vez que analizada caeríamos en la cuenta de que ello pudiera deberse a muchos de los votos que el BNG recibió de los votantes de los partidos al otro lado del PP, que habiéndose presentado en elecciones anteriores (2019) no lo hicieron en las del 2023.
Hoy dos años después de aquel 28 de mayo, el PP mantiene la Alcaldía del Concello de Marín con María Ramallo Vázquez al frente desarrollando una labor con sus ‘pros y contras’ que le acarrea no pocas críticas –a base de prolíficos y extensos comunicados de prensa- de los partidos en la oposición o las polémicas generadas, de aceptación o rechazo en las redes sociales, que de todo hay.
Un bienio más le queda a María Ramallo para completar proyectos aprobados o aportar soluciones a problemas que afectan a los vecinos. Lo que le será aprobado o demandado en las urnas de 2025.
Los resultados le fueron positivos pero la alternativa quedó por demostrar porque si bien la formación nacionalista consiguió pasar de ocupar tan solo un escaño en la bancada municipal a cuatro, esta cifra no fue suficiente para poder gobernar ni siquiera en coalición con el PSOE. La subida en número de ediles fue sorprendente a la vez que analizada caeríamos en la cuenta de que ello pudiera deberse a muchos de los votos que el BNG recibió de los votantes de los partidos al otro lado del PP, que habiéndose presentado en elecciones anteriores (2019) no lo hicieron en las del 2023.
Hoy dos años después de aquel 28 de mayo, el PP mantiene la Alcaldía del Concello de Marín con María Ramallo Vázquez al frente desarrollando una labor con sus ‘pros y contras’ que le acarrea no pocas críticas –a base de prolíficos y extensos comunicados de prensa- de los partidos en la oposición o las polémicas generadas, de aceptación o rechazo en las redes sociales, que de todo hay.
Un bienio más le queda a María Ramallo para completar proyectos aprobados o aportar soluciones a problemas que afectan a los vecinos. Lo que le será aprobado o demandado en las urnas de 2025.
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