martes, 1 de diciembre de 2020

MARÍN. LA 'POBREZA' AMENAZA A NUMEROSAS FAMILIAS DEPENDIENTES DE LA HOSTELERÍA

La alta incidencia de casos positivos entre la población podría impedir la apertura de la hostelería en Marín
El comité clínico estudia a que bares, cafeterias y restaurantes se les permitirá reabrir sus puertas a partir de este fin de semana
Manifestación de la hostelería ayer por Pontevedra (Foto Hoempo)

MARÍN. 01.12.2020. Una multitudinaria 'comitiva de protesta' convocada por Hoempo y formada por centenares de hosteleros de los concellos de Marín, Pontevedra y Poio recorrieron ayer las calles de la ciudad capitalina para protestar por la falta de atención que las administraciones dedican a la inquietante situación que atraviesan a consecuencia del decretado, -por la Xunta de Galicia-, cierre derivado de la pandemia y que les está originando unas pérdidas económicas que pone a un alto porcentaje de establecimientos a las puertas del cierre definitivo haciendo peligrar la subsistencia a muchas de familias que viven directa o indirectamente del sector.
Según clamaban ayer los portavoces de la manifestación "no podemos seguir cerrados y asumiendo gastos. las ayudas son parches. Queremos abrir y que nos dejen trabajar, tenemos el mismo derecho que los demás -refiriéndose al comercio que ocasiona aglomeraciones en las calles en estas fechas de rebajas y prenavideñas- pues el virus no entiende de horarios ni de tipo de negocios". 
La concentración 'se plantó' delante del edificio del Concello de Pontevedra y allí se leyó un manifiesto y se anunciaron más movilizaciones que tendrán su continuidad el jueves consistente en una caravana de vehículos que recorrerá las calles de Poio, Pontevedra y Marín. Saldrá a las 11.00h de la explanada de A Seca, en Poio.
Por otra parte esta tarde se reunirá el 'consejo de sabios', léase Comité Clínico de Sanidad donde se estudiará la posible apertura de la hostelería, a través de un plan de desescalada propuesto ayer por la Xunta en su reunión con representantes del sector a nivel de Galicia, y podría abrir un calendario que comenzaría la medianoche de este viernes, momento en el que podrían regresar a la actividad los bares que cumplen con la condición principal:  una incidencia acumulada a 14 días de menos de 150 casos por cada cien mil habitantes, que para los casos de Marin, Pontevedra y Poio no valdría por estar por encima de una incidencia de 250 casos. 
Los hosteleros que configuran el cierre en los tres concellos pontevedreses insisten en que "si la hostelería sigue cerrada, las ayudas deben ser más elevadas, porque las prometidas son insuficientes". Y rechazan que se achaque a la hostelería el problema: "Dejen de ponernos en el punto de mira. ¿Dónde se producen los contagios? ¿Por qué no se ponen encima de la mesa esos datos?  Hay concellos cuya incidencia sube, con la hostelería cerrada, lo cual demuestra que "nosotros no somos el problema". En Marín el 2 de noviembre (hace un mes) había 74 casos positivos y al día de hoy hay 75.
 

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